SER EMPRESARIO

Esta tarde he tenido el placer de poder estar con empresarios de mi ciudad intercambiando opiniones, inquietudes y hablando de los problemas que tenemos los empresarios para poder ir hacia adelante. Ha estado con nosotros nuestra alcaldesa de Puertollano donde nos ha brindado el apoyo del organismo público a todos los empresarios.

Personalmente llego a una conclusión donde la imagen de Puertollano debe de cambiar, tenemos una marca potencial que tenemos que explotar, PUERTOLLANO UNA CIUDAD PARA INVERTIR. Por otro lado hace tiempo que quería escribir este articulo para motivar a las personas que buscan trabajo pero no lo encuentran. No tiene nada que ver con los temas que hemos hablado en la reunión de hoy pero aprovecho para soltarlo ;-)  

Estamos atravesando uno de los peores momentos económicos de nuestras vidas, en la actualidad hay mucho paro, gente muy joven que no encuentra y cuando lo encuentra son empleos precarios o poco remunerados. Por otro lado nos encontramos con personas mayores (50 años en adelante) que según algunos empresarios no valen para trabajar. A todas esas personas os recomiendo que no utilicéis el verbo BUSCAR, utiliza el verbo CREAR,utiliza el verbo REINVENTAR, utiliza el verbo FABRICAR, utiliza el verbo RECICLAR. Son más difíciles que el de BUSCAR, sí, pero lo mismo ocurre con todo lo que se hace real, que se complica.

Da igual que te vistas de autónomo, de empresario o de empleado. Por si aún no lo has notado, ha llegado el momento de las empresas de uno mismo. Tú eres tu director general, tu presidente, tu director de marketing y tu asesor económico. La única empresa de la que no te podrán despedir jamás. Y tu departamento de I+D (eso que tienes sobre los hombros) hace tiempo que tiene sobre la mesa el encargo más difícil de todos los tiempos desde que el hombre es hombre: DISEÑAR TU PROPIA VIDA.

Suena mal, porque lo es. Pero corrígeme si la alternativa te está pagando las facturas de la luz, agua,etc...

Trabajo no es un buen sustantivo tampoco. Porque es mentira que no exista. Trabajo hay. Lo que pasa es que ahora se reparte entre menos gente, que en muchos casos se ve obligada a hacer más de lo que humanamente puede. Lo llaman productividad. Otra patraña, tan manipulable como todos los índices. Pero en fin.

Mejor busca entre tus habilidades, pregúntate ¿que sabes hacer? ¿que se te da bien?. Todos tenemos alguna habilidad que nos hace especiales. Alguna singularidad, alguna rareza. Lo difícil no es tenerla, lo difícil es encontrarla, identificarla a tiempo. Y entre esas rarezas, pregúntate cuáles podrían estar recompensadas. Si no es aquí, fuera. Si no es en tu sector, en cualquier otro. Por cierto, ¿qué es un sector hoy en día?.

Busca una necesidad insatisfecha en un grupo de gente dispuesta a gastar, sea en la moneda que sea. Aprende a hablar en su idioma. Y no me refiero sólo a la lengua vehicular, que también.

Busca un primer cliente. Reduce sus miedos, ofrécele una prueba gratis, sin compromiso, y coméntale que le devolverás el dinero si no queda satisfecho. Y por el camino, gánate su confianza, convéncele de que te necesita aunque él todavía no se haya dado cuenta. No pares hasta obtener un sí. Vendrá acompañado de algún “pero”, tú tranquilo que los peros siempre caducan y acaban cayéndose por el camino.

Y a continuación, déjate la piel por que quede encantado de haberte conocido. No escatimes esfuerzos, convierte su felicidad en tu obsesión. Hazle creer que eres imprescindible. En realidad nada ni nadie lo es, pero todos pagamos cada día por productos y servicios que nos han convencido de lo contrario.

Por último, busca una vida de la que no quieras retirarte jamás y un día día en el que nunca dejes de aprender.

Intenta no venderte y estarás mucho más cerca de que alguien te compre de vez en cuando. Ah, y olvídate de la estabilidad, eso es cosa del siglo pasado.